Pues por medio de Él la ley del Espíritu de vida me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte. Ro 8:2
domingo, 25 de enero de 2015
NOÉ
Génesis 6:9
"Noé era un hombre justo y honrado entre su gente. Siempre anduvo fielmente con Dios."
Decir que Noé era "justo" y "sin culpa" no quiere decir que él nunca haya cometido pecado. Más bien, significa que Noé amaba de todo corazón a Dios, a tal punto que lo obedeció cuando lo mandó a una labor que requería muchísima fe (nunca había llovido sobre la tierra).
La verdad es que se lee demasiado rápido la historia de Noé. Es necesario detenerse un instante y considerar varios aspectos que se pasan por alto al leer la fantástica historia del Arca. En Génesis 2:6 vemos que un manantial que salía de la misma tierra era el que se encargaba de hacer brotar las distintas plantas y árboles. Eso significa que en el tiempo del diluvio, NUNCA había llovido sobre la tierra. Esto hace aún más admirable la fe de Noé. Creyó en la Palabra de Dios, aún cuando nunca había visto caer una sola gota de lluvia del cielo. Creyó aún en medio de las burlas de aquella generación impía, que había hecho que a Dios "le pesara haber creado al hombre" (Génesis 6:6).
Como seres humanos somos muy propensos a ceder ante la presión y aceptación de los demás. De Noé podemos aprender que la recompensa por hacer caso omiso de las corrientes pecaminosas del mundo, del diablo y de nuestras bajas pasiones es demasiado grande. De la descendencia de Noé se repoblaría la tierra. Nadie más afuera de su familia se salvó.
Esto nos da también esperanza. Quizás eres el único creyente dentro de tu familia. Hoy hay buenas nuevas y esperanza para tí: Dios salva familias. Si bien es cierto la salvación es una decisión personal y nadie es responsable del pecado de los demás, el Señor tiene misericordia en consideración de sus siervos. ¡Hasta las nueras de Noé se salvaron!
Así que no pierdas la esperanza. Sigue buscando hacer la voluntad de Dios a pesar de las presiones para hacer lo malo. Sigue confiando en los planes que Dios tiene para tu vida a pesar de que no entiendas por lo que estás pasando. Noé pasó años construyendo el arca, obedeciendo a Dios para juntar a todas las parejas de animales. Imagina las burlas, los momentos difíciles, los probables problemas incluso familiares que pasó Noé por hacer la voluntad de Dios...
¿Estamos viviendo para influir en los demás o para ser influenciados por ellos?
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