viernes, 30 de junio de 2017

BALANZA DIVINA




Daniel 5:27
"TEKEL: Pesado has sido en balanza, y fuiste hallado falto."


Es muy frecuente que nos pesemos en la escala de la Palabra de Dios. Un buen ejercicio sagrado es leer algún salmo de David, y, mientras meditas en cada versículo, preguntarte: "¿Puedo decir esto?, ¿Sentí como David sintió, mi corazón fue roto por causa del pecado? ¿Ha estado mi alma llena de verdadera confianza en la hora de la dificultad como la suya cuando cantó las misericordias de Dios en la cueva de Adullam o en las cuevas de En-gedi? 


Otro buen ejercicio es ir a la vida de Cristo, y al leer, preguntarse hasta qué punto estamos en nuestra vida actual conformados a su semejanza. Tomemos también las epístolas, y veamos si podemos sentir algo de lo que los apóstoles sintieron al escribirlas. ¿Alguna vez has clamado como lo hizo Pablo: "¡Desgraciado soy yo, ¿Quién me librará del cuerpo de esta muerte?" ¿Podrías unirte a él y decir: "Para mí vivir es Cristo, y morir es ganancia"? 

Si leemos así la Palabra de Dios como una prueba de nuestra condición espiritual, tendremos buenas razones para detenernos muchas veces y decir: "Señor, siento que nunca he estado aquí, tráeme aquí, dame la verdadera penitencia, dame celo más cálido, lléname de amor más fervoroso, concédeme la gracia de la mansedumbre, hazme más semejante a Jesús, no me dejes "desfallecer".

Hagamos todo lo posible para no ser hallados faltos en esa balanza divina. Tomemos ejemplo de los hombres y mujeres temerosos de Dios. Así sea en nuestras vidas.

jueves, 29 de junio de 2017

ALABEMOS




Salmos 76:3
"Allí quebró las saetas del arco,
El escudo, la espada y las armas de guerra."


El grito glorioso de Nuestro Redentor de "Todo está cumplido", fue el golpe de la muerte de todos los adversarios de su pueblo, el rompimiento de "las flechas del arco, el escudo, la espada y la batalla". He aquí el héroe del Gólgota, usando su cruz como un yunque, y sus aflicciones como un martillo, lanzándose a acabar con un manojo de nuestros pecados, esas "flechas de arco" envenenadas. 


¡Qué golpes gloriosos daban los romanos con un martillo mucho más pesado que el legendario de Thor! Amado, ningún pecado de un creyente puede ahora ser una flecha mortal para herirlo, ninguna condenación puede ahora ser una espada para matarlo, porque el castigo de nuestro pecado fue llevado por Cristo, una expiación completa fue hecha de todas nuestras iniquidades por nuestro Bendito Sustituto y Fiador. ¿Quién acusa ahora? ¿Quién condena? Cristo ha muerto, más bien, ha resucitado. Jesús ha vaciado las aljabas del infierno, ha apagado todos los dardos ardientes, y ha roto la cabeza de cada flecha de la ira. 

El suelo está sembrado de astillas y reliquias de las armas de la guerra del infierno, que sólo nos son visibles para recordarnos nuestro peligro anterior y nuestra gran liberación. El pecado no tiene más dominio sobre nosotros. Jesús lo terminó y lo guardó para siempre. Las destrucciones han llegado a un fin perpetuo. 

Hablemos hoy de todas las maravillas del Señor, nosotros que hacemos mención de su nombre, no callemos ni de día, ni cuando el sol se va a su descanso. ¡Bendice al Señor, oh alma mía!

miércoles, 28 de junio de 2017

NOS AMÓ PRIMERO



1 Juan 4:19
"Nosotros le amamos a Él, porque él nos amó primero."


No hay luz en el planeta sino la que procede del sol. Y no hay verdadero amor a Jesús en el corazón sino lo que viene del Señor Jesús mismo. De esta fuente desbordante del amor infinito de Dios, todo nuestro amor a Dios debe brotar. Esto debe ser siempre una verdad grande y cierta, que no lo amamos por otra razón que porque Él nos amó primero. 


Nuestro amor a Él es el justo descendiente de su amor para con nosotros. La admiración fría, al estudiar las obras de Dios, cualquiera puede tener, pero el calor del amor sólo puede ser encendido en el corazón por el Espíritu de Dios. ¡Cuán maravilloso es que, cuando nos rebelamos contra Dios, Él, con una exhibición de tan asombroso amor, nos traiga de vuelta. ¡No! Nunca debiéramos tener un grano de amor hacia Dios a menos que haya sido sembrado en nosotros por la dulce semilla de su amor para nosotros. El amor, pues, tiene por padre el amor de Dios derramado en el corazón; pero después de haber nacido divinamente, debe ser divinamente alimentado. 

El amor no es una planta que florece naturalmente en el suelo humano, debe ser regada desde arriba. El amor a Jesús es una flor de naturaleza delicada, y si no recibe alimento sino lo que podía extraerse de la roca de nuestros corazones, pronto se marchitaría. Como el amor viene del cielo, así debe alimentarse del pan celestial. No puede existir en el desierto a menos que sea alimentado por el maná desde lo alto. El amor debe alimentarse del amor. La misma alma y vida de nuestro amor a Dios es su amor a nosotros.

Dejémonos amar por Dios, y luego, derramemos de ese mismo amor en forma de intimidad con Él, servicio y buen testimonio. Así sea.

martes, 27 de junio de 2017

ESCUDRIÑAD



Juan 5:39
"Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;"


La palabra griega que aquí se traduce "escudriñad" significa una búsqueda estricta, cercana, diligente, curiosa, tal como hacen los hombres cuando están buscando oro, o cazadores cuando están buscando presas. No debemos contentarnos con haber dado una lectura superficial a un capítulo o dos, sino con la vela del Espíritu debemos deliberadamente buscar el significado de la Biblia. 


Las Sagrada Escritura requiere de la búsqueda exhaustiva, y gran parte de ella sólo se puede aprender mediante un estudio cuidadoso. Hay leche para bebés, pero también carne para hombres fuertes. Los rabinos sabiamente dicen que una montaña de materia cuelga de cada palabra y de cada título de la Escritura. Tertuliano exclama: "Adoro la plenitud de las Escrituras". Ningún hombre que simplemente roza el libro de Dios puede sacar provecho de ello. Debemos cavar y minar hasta que obtengamos el tesoro escondido. 

La puerta de la palabra sólo se abre ante la llave de la diligencia. Las Escrituras dicen que escudriñemos. Son los escritos de Dios, que llevan el sello divino y su inspiración, ¿quién se atreverá a tratarlos con ligereza? El que los desprecia desprecia al Dios que los escribió. Dios no permita que ninguno de nosotros deje nuestras Biblias para convertirnos en cristianos que no leen. La palabra de Dios pagará esa búsqueda. 

La Escritura crece sobre el estudiante. Está llena de sorpresas. Bajo la enseñanza del Espíritu Santo, al ojo del buscador brilla con esplendor de revelación, como un vasto templo pavimentado con oro forjado, cubierto de rubíes, esmeraldas y todo tipo de gemas. Ninguna mercancía es como la mercancía de la verdad de la Escritura. Por último, las Escrituras revelan a Jesús: "Son ellos los que dan testimonio de mí". 

No se puede pedir a los lectores de la Biblia ningún motivo más poderoso que éste: el que encuentra a Jesús encuentra la vida, el cielo, todas las cosas. Feliz aquel que, buscando en su Biblia, descubre a su Salvador.

lunes, 26 de junio de 2017

GRANDES COSAS HA HECHO



Salmos 126:3
"Grandes cosas ha hecho Jehová con nosotros;
Estaremos alegres."


Algunos cristianos son tristemente propensos a mirar  el lado oscuro de todo, y a pensar más en lo que han sufrido que en lo que Dios ha hecho por ellos. A muchos al preguntarles sobre su impresión de la vida cristiana,  describirán sus continuos conflictos, sus profundas aflicciones, sus tristes adversidades y la pecaminosidad de sus corazones, sin apenas hacer alusión a la misericordia y ayuda que Dios les ha concedido. 


Pero un cristiano cuya alma está en buen estado, se acercará alegremente y dirá: "No hablaré de mí, sino de la honra de mi Dios. El me sacó de un hoyo horrible y de la muerte y puso mis pies sobre una roca. Le dio salida al dolor, y puso en mi boca un cántico nuevo. Más o menos eso quiso expresar el salmista al escribir: "El Señor ha hecho grandes cosas por mí, de las cuales me alegro ". Tal resumen es lo mejor que cualquier hijo de Dios puede presentar. Es cierto que soportamos pruebas, pero es tan cierto que somos liberados de ellas. Es cierto que tenemos nuestras batallas, y lo sabemos con tristeza, pero es tan cierto que tenemos un Salvador suficiente, que vence estas corrupciones y nos libra de su dominio. 

Al mirar hacia atrás, sería erróneo negar que hemos estado en el Desierto de la Desesperación, y nos hemos esparcido por el Valle de la Humillación, pero sería igualmente malo olvidar que hemos pasado por ellos de manera segura y provechosa. No hemos permanecido en ellos, gracias a nuestro Todopoderoso Dios, que nos ha llevado "a un lugar rico". 

Cuanto más profundos son nuestros problemas, más fuerte es nuestro agradecimiento a Dios, que nos ha guiado a través de todos, y nos ha preservado hasta ahora. Nuestros dolores no pueden estropear la melodía de nuestra alabanza, los consideramos la parte baja de la canción de nuestra vida, pero Dios igualmente "Hizo grandes cosas por nosotros, de las cuales nos alegramos"

domingo, 25 de junio de 2017

CUMPLE SU PALABRA




Números 11:23
"Entonces Jehová respondió a Moisés: ¿Acaso se ha acortado la mano de Jehová? Ahora verás si se cumple mi palabra, o no."

Dios había hecho una promesa positiva a Moisés que por el espacio de un mes entero Él alimentaría a la vasta hueste en el desierto con carne. Moisés, siendo alcanzado por un ataque de incredulidad, se pregunta si será posible. Miró a la criatura en lugar del Creador. ¿Pero el Creador espera que la criatura cumpla su promesa para Él? No. El que hace la promesa la cumple siempre por su omnipotencia sin ayuda. 


Sus promesas no dependen para su cumplimiento de la cooperación insignificante del hombre. Podemos percibir de inmediato el error que Moisés cometió. Y sin embargo, ¡Regularmente hacemos lo mismo! Dios ha prometido proveer nuestras necesidades, y miramos a la criatura para hacer lo que Dios ha prometido hacer. Nos aflije no tener, nos preocupa vivir para trabajar, cuando Dios es el proveedor por excelencia. 

Esto no significa que no trabajemos. Sino que el fundamento de la fe no es la suficiencia de los medios visibles para la realización de la promesa, sino la suficiencia del Dios invisible, que seguramente hará lo que ha dicho. Si después de ver claramente que la responsabilidad recae en el Señor y no en la criatura, nos atrevemos a caer en la desconfianza, la pregunta de Dios llega a nosotros poderosamente: "¿Se ha acortado la mano del Señor?" 

Que también en su misericordia pueda ocurrir que, con la pregunta, pueda resplandecer en nuestras almas esa bendita declaración: "Verás ahora si mi palabra se cumplirá o no". ¡No dudemos en que Dios dará lo que ha prometido!

sábado, 24 de junio de 2017

LUCHAR CON CRISTO



1 Crónicas 5:22
"Y cayeron muchos muertos, porque la guerra era de Dios; y habitaron en sus lugares hasta el cautiverio."


Guerrero, que luchas bajo la bandera del Señor Jesús, observa este verso con santa alegría, porque como era en los días antiguos, así es ahora, si la guerra es de Dios, la victoria es segura. 


Los hijos de Rubén, y los gaditas, y la media tribu de Manasés, apenas podían reunir a cinco y cuarenta mil hombres de guerra, y sin embargo, en su guerra con los agarenos, mataron "como a cien mil hombres", porque clamaron a Dios en la batalla, y fue escuchados porque pusieron su confianza en Él." El Señor no salva ni por muchos ni por pocos. Salva por amor a su pueblo y honor a Su Nombre. Es cierto que debemos usar todos los medios adecuados, pero nuestra confianza debe descansar en el Señor solamente, porque Él es la espada y el escudo de su pueblo. 

La gran razón del extraordinario éxito de Israel en la época de la conquista radicaba en el hecho de que sabían que "la guerra era de Dios". Amados hermanos, copiemos esa actitud de fe. La batalla es del Señor y Él entregará a sus enemigos en nuestras manos.

¡Levántate! ¡Pelea con Jesús! La contienda no será larga. Al que venza, se le dará una corona de vida... Y con el Rey de la gloria reinará eternamente.

viernes, 23 de junio de 2017

REPRENSIÓN




Apocalipsis 3:19
"Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete."


La reprensión del Señor... Ahhh, cómo quisiéramos evitarla. A veces pensamos que somos "buenos". Que nos merecemos lo mejor de la vida, siempre. En nuestro interior, nuestra oración a veces puede ser como la de aquel fariseo de la parábola: "Oh, Dios, gracias porque no soy como aquella persona. No mato, no robo, no soy infiel". Pero la verdad es que somos humanos. No hay "categorías de pecados". La Biblia dice que todos hemos pecado y estamos lejos de la presencia gloriosa de Dios.


Y Dios utiliza una serie de métodos para hacernos volver al camino. Cuando estamos pasando por una situación difícil, podríamos preguntar: "¿Por qué?, Si soy tan bueno. Si te sigo. Si voy a la iglesia". Pero la verdad es que cada situación que pasa en nuestra vida tiene un propósito divino.

Si el día de hoy sabes que estás pasando por una situación que Dios la está usando para reprenderte, para corregirte, da gracias y trata de aprender la lección. Es preferible sufrir un poco acá en la tierra, que toda una eternidad lejos de la presencia de Dios. 

Que el día de hoy tomemos otra postura cuando veamos la reprensión de Dios en nuestra vida. Si te reprende y castiga es porque te ama, bendito sea Su Nombre.

jueves, 22 de junio de 2017

ABORRECER EL MAL




Salmos 97:10
"Los que amáis a Jehová, aborreced el mal;
El guarda las almas de sus santos;
De mano de los impíos los libra."


Tú tienes buenas razones para "odiar el mal", porque sólo considera el daño te ha hecho ya. ¡Oh, qué mundo de maldad el pecado ha traído a tu corazón! El pecado te cegó para que no pudieras ver la belleza del Salvador... Te hizo sordo para que no pudieras escuchar las tiernas invitaciones del Redentor. El pecado convirtió tus pies en el camino de la muerte, y derramó veneno en la misma fuente de tu ser. Contaminó tu corazón, y lo hizo "engañoso por encima de todas las cosas, y desesperadamente perverso". 


¡Oh, qué criatura eras cuando el mal había hecho todo lo posible contigo, antes de interponerse la gracia divina! Tú fuiste heredero de la ira como otros. Has corrido con la multitud para hacer el mal. Ésos eramos todos nosotros a decir verdad. Pero Pablo nos recuerda: "Mas vosotros sóis lavados, mas vosotros sóis santificados, mas vosotros sóis justificados en el nombre del Señor Jesús, y por el Espíritu de nuestro Dios". 

Tenemos buenas razones, de hecho, para odiar el mal cuando miramos hacia atrás y vemos sus mortales labores. Tal daño nos hizo el mal, que nuestras almas se habrían perdido si el amor omnipotente no hubiera interferido para redimirnos. Incluso ahora es un enemigo activo, siempre mirando para hacernos daño, y arrastrarnos a la perdición. Por lo tanto, "odiad el mal", oh cristianos, a menos que deseemos problemas. Si quieres esparcir tu camino con espinas y plantar cardos en tu almohada de muerte, entonces olvidarás "aborrecer el mal". Pero si quieres vivir una vida feliz y junto al Señor, entonces camina en todos los caminos de la santidad, aborreciendo el mal hasta el fin. 

Si realmente amas a tu Salvador y lo honras, entonces "aborrece el mal". No sabemos de ninguna cura para el amor del mal en un cristiano como abundante relación e intimidad con el Señor Jesús. Si pasas tiempo con Él, es imposible para ti estar en paz con el pecado. ¡Que Dios nos ayude hoy a evitar toda clase de maldad!

miércoles, 21 de junio de 2017

PUEBLO SEGUIDOR DE DIOS




2 Corintios 11:22
"¿Son hebreos? Yo también. ¿Son israelitas? Yo también. ¿Son descendientes de Abraham? También yo."


Tenemos aquí un reclamo personal del apóstol Pablo. Él sabía que su reclamación era indiscutible, pero hay muchas personas que actualmente hacen alarde de una posición, sin tener argumentos para hacerlo. Si estamos con confianza declarando: "Yo también soy israelita", digámoslo después de haber buscado en nuestro corazón estar en la presencia de Dios. 


Pero si podemos demostrar que estamos siguiendo a Jesús, si podemos decir con el corazón: "Confío plenamente en Él", eso quiere decir que primero confías en Él, luego también... y luego también, entonces la posición de los santos de Dios nos pertenece. Podemos ser los más pequeños en el pueblo de Dios, podemos ser "menos que el más pequeño de todos los santos", sin embargo, puesto que las misericordias de Dios pertenecen a su pueblo, alcanzaremos gracia y misericordia también. 

La afirmación de ser parte del pueblo de Dios no sólo tiene sus gozos y privilegios, sino también sus condiciones y deberes. Debemos compartir con el pueblo de Dios en todo momento. Cuando oímos hablar a alguien con desprecio y ridiculizando a los demás por ser cristianos, debemos avanzar atrevidamente y decir: "Yo también". Cuando los vemos trabajando para Cristo, dando su tiempo, su talento, todo su corazón a Jesús, debemos ser capaces de decir: "Yo también". 

O también demostrar nuestra gratitud y nuestra devoción, y vivir como aquellos que, habiendo reclamado un privilegio, están dispuestos a asumir la responsabilidad relacionada con él. ¡Seamos parte del pueblo de Dios en todo momento!

martes, 20 de junio de 2017

SOY VIL



Job 40:4
"He aquí que yo soy vil; ¿qué te responderé?
Mi mano pongo sobre mi boca."


¡Una palabra de ánimo traigo hoy para ti! ¿Piensas que no debes venir a Dios porque eres vil? Pues bien, no hay un sólo perfecto que viva en la tierra, sino que todos hemos pecado y estamos lejos de la presencia gloriosa de Dios. Si Job, Daniel, Isaías y Pablo estaban obligados a decir: "Yo soy vil", ¿te avergonzarás de unirte a la misma confesión? 


Si la gracia divina no erradica todo pecado del creyente, ¿cómo esperas hacerlo tú mismo? Y si Dios ama a su pueblo mientras son todavía viles, ¿crees que tu vileza impedirá que te ame? Jesús te llama, y ​​tal como tú eres te adopta. "No a los justos, sino a los pecadores, Jesús vino a llamar."

Si el día de hoy dices: "Tú has muerto por los pecadores, yo soy un pecador, Señor Jesús, rocía tu sangre sobre mí". Si confiesas tu pecado, encontrarás perdón. Si ahora, con todo tu corazón, dices: "Soy vil, límpiame," ahora serás lavado. Si dejas que el Espíritu Santo opere en tu vida te levantarás con todos tus pecados perdonados. Y aunque te despertaste esta mañana con cualquier tipo de pecado que puedas imaginar, descansarás esta noche en el Amado. 


Si crees en el que justifica al impío, eres salvo. ¡Oh! Que el Espíritu Santo te dé fe salvadora y que el Señor Jesús transforme tu llanto en danza y que por cenizas te dé resplandor. Bendito sea Dios.

lunes, 19 de junio de 2017

NOS AMÓ PRIMERO




1 Juan 4:8
"El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor."


La marca distintiva de un cristiano es su confianza en el amor de Cristo, y la entrega de sus afectos a Cristo a cambio de una paz que sobrepasa todo entendimiento. Primero, la fe pone su sello en el hombre al permitir al alma decir con el apóstol: "Cristo me amó y se dio a sí mismo por mí". Entonces el amor de Dios opera algo extraordinario en nosotros. "Lo amamos porque Él nos amó primero". 


En el tiempo de los Hechos de los Apóstoles, esta doble marca era claramente visible en todos los creyentes en Jesús: Eran hombres que conocían el amor de Cristo, y descansaban sobre Él como un hombre se apoya en un bastón cuya confianza ha probado. El amor que sentían hacia el Señor no era una emoción tranquila que escondían dentro de sí en la cámara secreta de sus almas, y de la cual sólo hablaban en sus asambleas privadas cuando se reunían el primer día de la semana y cantaban himnos En honor a Cristo Jesús el crucificado, sino que era una pasión que provocaba en ellos una energía tan vehemente y consumidora, que era visible en todas sus acciones.

El amor a Jesús era una llama que alimentaba el núcleo y el corazón de su ser. El celo por la gloria del Rey Jesús fue el sello y la marca de todos los cristianos genuinos. Debido a su dependencia del amor de Cristo se atrevieron a evangelizar a costas de su propia vida, el amor por su Señor los hizo amar y confiar. Debería ser igual en esta época, ya que Cristo sigue siendo el mismo. Los hijos de Dios son gobernados en sus más íntimos poderes por el amor; el amor de Cristo los constriñe. Ellos se alegran de que el amor divino está puesto sobre ellos, sienten que es derramado en el corazón por el Espíritu Santo que se les da, y luego por la fuerza de la gratitud es que aman al Salvador con un corazón puro, con fervor. 

Amado creyente: ¿lo amas? Antes de dormir, analicemos si con nuestras acciones estamos demostrando el amor que Dios ha puesto en nosotros primero.

domingo, 18 de junio de 2017

PUERTA CERRADA



Génesis 7:16
"Y los que vinieron, macho y hembra de toda carne vinieron, como le había mandado Dios; y Jehová le cerró la puerta."


Noé fue encerrado lejos de todo el mundo por la mano del amor divino. La puerta del propósito de la elección se interpone entre nosotros y el mundo que está lleno de maldad. No somos del mundo ni siquiera como nuestro Señor Jesús no era del mundo, pero vivimos en él, y muchas veces abrimos la puerta al diluvio. 


Noé fue encerrado con su Dios, para que no se mojara por las corrientes de maldad. "Venid al arca", fue la invitación del Señor, por la cual mostró claramente que Él mismo tenía la intención de morar en el arca con su siervo y su familia. Así todos los elegidos moran en Dios y Dios en ellos. Gente dichosa que convivió durante meses en el mismo círculo que contiene a Dios en la Trinidad de sus personas, Padre, Hijo y Espíritu. No dejemos nunca de prestar atención a ese llamamiento de gracia: "Venid, pueblo mío, entraos en vuestros aposentos, y cerrando vuestras puertas a vuestro alrededor, os esconderé como por un momento hasta que la indignación se sobrepase". 

Noé estaba tan encerrado que ningún mal podía alcanzarlo. Fuera del arca todo era ruina, pero dentro de ella todo era descanso y paz. Sin Cristo perecemos, pero en Cristo Jesús hay seguridad perfecta. Noé estaba tan encerrado que ni siquiera podía desear salir, y los que están en Cristo Jesús están en Él para siempre. Nunca más saldrán a la maldad, porque la fidelidad eterna los ha encerrado, y la maldad infernal no los puede arrastrar. El príncipe de la casa de David cerró, y nadie abrió. 

Que Dios nos dé la gracia de escoger sabiamente. Entremos todos en su descanso, cerrando la puerta a la maldad. Así sea.

sábado, 17 de junio de 2017

GLORIOSO




1 Timoteo 3:16
"E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad:
    Dios fue manifestado en carne,
    Justificado en el Espíritu,
    Visto de los ángeles,
    Predicado a los gentiles,
    Creído en el mundo,
    Recibido arriba en gloria."


Hemos visto a nuestro bien amado Señor en los días de su carne, humillado y dolorido. Porque Él fue "despreciado y desechado por los hombres, varón de dolores y familiarizado con el dolor". Aquel cuyo resplandor es como la mañana, llevaba el saco de dolor como su vestido diario: la vergüenza era su manto, y el reproche era su vestidura. 


Pero ahora, en cuanto ha triunfado sobre todos los poderes de las tinieblas sobre el árbol ensangrentado, nuestra fe contempla a nuestro Rey que regresa con las ropas teñidas de Edom, vestido con el esplendor de la victoria. ¡Cuán glorioso debe haber sido a los ojos de los serafines, cuando una nube lo ocultó de la vista de los mortales, y subió al cielo! Ahora lleva la gloria que tuvo con Dios cuando la tierra no existís, y otra gloria por haber ganado en la lucha contra el pecado, la muerte y el infierno. Como vencedor lleva la ilustre corona. 

¡Escucha las canciones celestiales! Es un canto nuevo y dulce: "Digno es el Cordero que fue inmolado, porque nos ha redimido a Dios por su sangre". Lleva la gloria de un Intercesor que nunca puede fallar, de un Príncipe que no puede ser derrotado, de un Conquistador que ha vencido a todos los enemigos, de un Señor que tiene la fidelidad del corazón de todo sujeto. Jesús lleva toda la gloria que la pompa del cielo puede otorgarle, que diez mil veces diez mil ángeles pueden ministrarle. 

Nosotros no podemos ni con toda la imaginación posible concebir su grandeza excedente. Pero habrá otra revelación cuando descenderá del cielo en gran poder, con todos los santos ángeles: "Entonces se sentará en el trono de su gloria". ¡Oh, el esplendor de esa gloria! Para arrebatar el corazón de su pueblo. Tampoco esto es el cierre, porque en la eternidad sonará su alabanza, "Tu trono, oh Dios, es por los siglos de los siglos". 

Hermano, si quisieras gozar en la gloria de Cristo en el más allá, Él debe ser glorioso y glorificado en tu vida ahora. ¿Es así?

viernes, 16 de junio de 2017

LA BONDAD DE DIOS




Tito 3:4
"Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres."


¡Qué dulce es contemplar al Salvador que se comunica con su propio pueblo amado! No puede haber nada más delicioso que, por el Espíritu Divino, ser conducido a este fértil campo de deleite. 


Deja que la mente reflexione por un instante sobre la historia del amor del Redentor. Cuando meditamos sobre este asombroso amor y vemos al glorioso Padre de la Iglesia dotándola de toda su antigua riqueza, nuestras almas pueden desmayarse de gozo. ¿Quién es el que puede soportar tal peso de amor? Ese sentido parcial del que el Espíritu Santo a veces se complace en pagar, es más de lo que el alma puede contener. Cuando el alma tenga entendimiento para discernir todos los dones del Salvador, la sabiduría para estimarlos y el tiempo para meditar sobre ellos, entonces comulgaremos con Jesús de una manera más cercana que en el presente. 

¿Pero quién puede imaginar la dulzura de tal comunión? Debe ser una de las cosas que no han entrado en el corazón del hombre, sino que Dios ha preparado para los que le aman. ¡Oh, ver abrir la puerta de los graneros de José y ver la abundancia que nos ha guardado! Esto nos abrumará con amor. Por la fe vemos, como en un vaso oscuro, la imagen reflejada de sus tesoros ilimitados, pero cuando veamos realmente las cosas celestiales mismas, con nuestros propios ojos, ¡Cuán profunda será la corriente de compañerismo en que nuestra alma se bañará!  

Hasta entonces nuestros sonetos más fuertes serán reservados para nuestro amado benefactor, Jesucristo nuestro Señor, cuyo amor por nosotros es maravilloso. ¡Bendito sea nuestro bondadoso Señor!

jueves, 15 de junio de 2017

SE HUMILLÓ A SÍ MISMO




Filipenses 2:8
"y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz."


Jesús es el gran maestro de humildad de corazón. Necesitamos aprender de Él diariamente. ¡Siempre me impacta imaginar al Maestro tomando una toalla y lavando los pies de sus discípulos! 


Es una de mis metas el bajarle a mi orgullo. Como seguidor de Cristo, no puedo ser orgulloso, cuando Él es el ejemplo vivo de la humildad. ¿No es esta frase el compendio de su biografía, "se humilló a sí mismo"? ¿No estaba Él en la tierra despojándose de una sola túnica de honor y luego de otra, hasta que, desnudo, fue atado a la cruz, y allí vació su ser íntimo, derramando su sangre de vida, dando su vida por nosotros hasta el punto que lo pusieron sin dinero en una tumba prestada? Si esto hizo Jesús, ¿cómo podemos ser orgullosos? 

Párate al pie de la cruz, y cuenta las gotas carmesí por las que has sido purificado. Ve la corona de espinas. Las marcas de sus hombros azotados, sus manos y sus pies clavados con hierro áspero, y todo su ser sometido a la burla y al desprecio. Ve la amargura, las angustias y el dolor interior. Escucha el grito "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?" Y si para este punto no nos provoca el postrarnos y adorarle, es que no hemos entendido el sacrificio realizado con tal de salvarnos. 

Yo estaba tan perdido que nada podía salvarme sino el sacrificio del único engendrado de Dios. Piensa en eso, y como Jesús se inclinó por ti, luego inclínate en la humildad a sus pies. Que el Señor nos traiga en contemplación al Calvario, entonces nuestra posición ya no será la del hombre pomposo de orgullo, sino que tomaremos el lugar humilde de quien ama mucho porque le ha sido perdonado mucho. 

El orgullo no puede vivir debajo de la cruz. Vamos a sentarnos allí y aprender nuestra lección, y luego levantarnos y llevarla a la práctica.

miércoles, 14 de junio de 2017

ALFAREROS



1 Crónicas 4:23
"Estos eran alfareros, y moraban en medio de plantíos y cercados; moraban allá con el rey, ocupados en su servicio."


Los alfareros eran el grado más alto de los trabajadores en la época de los reyes. Usualmente, el rey necesitaba alfareros, y por lo tanto estaban en servicio real, aunque el material sobre el que trabajaban no era más que arcilla. Nosotros también podemos estar ocupados en la parte más humilde de la obra del Señor, pero es un gran privilegio hacer cualquier cosa por El Rey. 


El texto nos habla de los que habitaban entre las plantas y los setos, teniendo trabajos difíciles, rústicos, de cobertura y de zanjas. Ellos pudieron haber deseado vivir en la ciudad, en medio de su vida, sociedad y refinamiento, pero ellos valoraban sus lugares designados, porque ellos también estaban haciendo la obra del rey. El lugar nuestro en el reino está asegurado, y no debemos apartarnos de él por capricho, sino buscar servir al Señor, siendo una bendición para aquellos entre los que residimos. 

Estos alfareros y jardineros tenían compañía real, porque moraban "con el rey" y aunque entre setos y plantas, habitaban con el rey allí. Ningún lugar u ocupación, por engorrosa que sea, puede privarnos de la comunión con nuestro divino Señor. Sea que visitemos prisioneros, enfermos, que nos toque hacer limpieza o algo similar, siempre podemos ir con el rey. En todas las obras de fe podemos contar con la comunión de Jesús. Es cuando estamos en su obra que podemos contar con su sonrisa. 

¡Así que ánimo obreros! Aunque sientan que pasan desapercibidos en medio de la suciedad y la miseria, tengan buen ánimo, pues es para El Rey de reyes que están trabajando. Permanezcamos en Él, pues el trabajo para el reino dura eternamente.

martes, 13 de junio de 2017

MAESTRO BUENO



Mateo 19:16
"Entonces vino uno y le dijo: Maestro bueno, ¿qué bien haré para tener la vida eterna?"


El joven rico utilizó apropiadamente el término "Maestro" para hablar con Jesús. Él es de hecho mi Maestro por excelencia. Necesito aprender de Él, sentarme a sus pies. Yo soy tanto su siervo como su discípulo, y considero mi más alto honor el poseer el doble rol. Si Él me pregunta por qué le llamo "bueno", debería tener una respuesta lista. 


Es cierto que "no hay bueno sino uno, es decir, Dios", pero entonces Él es Dios, y toda la bondad de la Deidad resplandece en Él. En mi experiencia, lo he encontrado bueno, tan bueno, de hecho, que todo el bien que tengo me ha llegado a través de Él. Él fue bueno conmigo cuando estaba muerto en el pecado. Él me levantó por el poder de su Espíritu. Ha sido bueno conmigo en todas mis necesidades, pruebas, luchas y tristezas. Nunca podría haber un Maestro mejor, porque su servicio es la libertad, su regla es el amor y su regalo es la misericordia.

Cuando me enseña como mi Maestro, Él es indescriptiblemente bueno, su doctrina es divina, su manera es condescendiente, su Espíritu es la dulzura misma. Ningún error se mezcla con su instrucción. Pura es la verdad dorada que Él da a luz, y todas sus enseñanzas conducen a la bondad, santificando y edificando al discípulo. Los ángeles le encuentran un buen Maestro y se complacen en cantarle eternamente. Los santos antiguos demostraron que era un buen Maestro, y cada uno de ellos se alegró al cantar: "Yo soy tu siervo, oh Señor". Mi propio y humilde testimonio debe tener sin duda el mismo efecto. 

Yo llevaré este testimonio ante mis amigos y vecinos, pues posiblemente puedan ser guiados por mi historia de vida a buscar a mi Señor Jesús como su Maestro. Sé que nunca se arrepentirían de una acción tan sabia. ¡Que mi Maestro me ayude a ser un discípulo atento y fiel!

lunes, 12 de junio de 2017

ESPÍRITU Y CARNE




Gálatas 5:17
"Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis."


En el corazón de cada creyente hay una lucha constante entre la vieja naturaleza y la nueva. La vieja naturaleza es muy activa y no pierde la oportunidad de poner todas las armas de su letal arsenal contra la gracia recién nacida. Mientras que por otra parte, la nueva naturaleza está siempre en vigilancia para resistir y destruir a su enemigo. La gracia dentro de nosotros empleará la oración, y la fe, y la esperanza, y el amor, para expulsar el mal. 


Todo eso se conoce como "toda la armadura de Dios", y nos ayuda a luchar la guerra espiritual. Estas dos naturalezas opuestas nunca dejarán de luchar mientras estemos en este mundo. Tendremos una batalla el resto de nuestra vida, pero la ventaja es que sabemos qué equipo va a ganar. El enemigo está tan firmemente arraigado dentro de nosotros que nunca podrá ser expulsado mientras estamos en este cuerpo... pero aunque estamos muy atormentados y, a menudo, en un conflicto intenso, tenemos un ayudante omnipotente.

Incluso Jesús, el capitán de nuestra salvación, está siempre con nosotros, y nos asegura que eventualmente saldremos más que vencedores por medio de Él. ¿Estás peleando con el adversario hoy? ¿Están Satanás, el mundo y la carne, todos contra ti? No te desanimes ni desmayes. ¡Lucha en el nombre de Jesús! Porque Dios mismo está con nosotros. 

Jehová Nissi es tu bandera, y Jehová Rapha es el sanador de tus heridas. No temas, vencerás, porque ¿quién podrá vencer a la Omnipotencia? Lucha "mirando a Jesús". Y aunque largo y severo sea el conflicto, dulce será la victoria, y gloriosa la recompensa prometida. "De fuerza en fuerza sigue adelante. No dejes de luchar y de orar, porque pronto verás la recompensa celestial.

domingo, 11 de junio de 2017

DESIERTO EN PARAÍSO




Isaías 51:3
"Ciertamente consolará Jehová a Sion; consolará todas sus soledades, y cambiará su desierto en paraíso, y su soledad en huerto de Jehová; se hallará en ella alegría y gozo, alabanza y voces de canto."


Un desierto sin oasis... seco, árido. ¡Qué vista más espantosa! ¡Que horrible! ¡Pero mira maravilla! De repente, levantándose de la abrasadora arena, veo una planta de renombre. Y a medida que le crecen brotes, el brote se expande - es una rosa, y a su lado un lirio dobla su cabeza modesta. ¡Milagro de milagros! Como la fragancia de esas flores se difunde en el desierto y se transforma en un campo fructífero, y todo alrededor florece en exceso, la gloria de Dios llega a nuestra vida y la transforma de desiertos a manantiales. 


No lo llama Sahara, lo llama paraíso. No habla ya de él como el valle de la sombra de la muerte, porque donde los esqueletos están blanqueando al sol, he aquí se proclama una resurrección, y se resucita a los muertos, a un poderoso ejército, lleno de vida inmortal. Jesús es esa planta de renombre, y su presencia hace nuevas todas las cosas. 

Tampoco la maravilla es menor en la salvación de cada individuo. Ahí me veo, querido lector, echado fuera, un niño sucio, contaminado con mi propia sangre, dejado para ser alimento para bestias de presa. Pero he aquí, he sido rescatado por una mano divina, y por causa de ella hemos sido compadecidos, perdonados, lavados y purificados de la contaminación. Hemos sido adoptados en la familia del cielo.

El amor está sobre tu frente, y el anillo de fidelidad está en tu mano. Ahora eres un príncipe para Dios, aunque una vez fuiste huérfano y echado fuera. Esto definitivamente hace que el corazón estéril cante de alegría. ¡Bendito salvador!

sábado, 10 de junio de 2017

DÍA Y NOCHE




Génesis 1:5
"Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un día."


¿Fue así en el principio? ¿La luz y la oscuridad dividieron el reino del tiempo en el primer día? Entonces no es de extrañar si también tengo cambios en mis circunstancias desde el sol de la prosperidad hasta la medianoche de la adversidad...


No siempre estaré en el resplandor del mediodía incluso en las preocupaciones de mi alma, debo esperar en las estaciones para llorar la ausencia de mis alegrías anteriores, y buscar a mi Amado en la noche. No estoy solo en esto, porque todos los amados del Señor han tenido que cantar el canto mezclado del juicio y de la misericordia, del juicio y la liberación, del luto y del deleite. Es uno de los arreglos de la Divina Providencia que el día y la noche no cesarán ni en la creación espiritual o natural hasta que lleguemos a la tierra de la cual está escrito, "allí no hay noche". Lo que nuestro Padre celestial ordena es sabio y bueno.

¿Qué debo hacer mientras tanto? Aprender primero a contentarme con este orden divino, y estar dispuesto a recibir lo que Dios permita en mi vida. Alabar al Señor por el sol de alegría cuando amanece, y por la penumbra de la tarde cuando anochece. Hay belleza tanto al amanecer como al atardecer. Cantar de ella, y glorificar al Señor es una buena forma de estar vivo. Como el ruiseñor, vierte tus notas a todas horas. Creo que la noche es tan útil como el día. Los rocíos de gracia caen pesadamente en la noche de dolor. Las estrellas de la promesa resplandecen gloriosamente en medio de la oscuridad de la pena. 


Continúa tu servicio bajo todos los cambios. Cada hora tiene su deber, continúa en tu llamado como siervo del Señor hasta que de repente aparezcas en su gloria. Mi alma, tu noche de vejez y muerte se acerca. No lo temas, porque es parte del día. Y el Señor ha dicho: "Lo cubriré todo el día". ¡Bendito mi Dios!

viernes, 9 de junio de 2017

SANADOR




Salmos 103:3
"El es quien perdona todas tus iniquidades,
El que sana todas tus dolencias;"


Algo cierto en esta vida es que todos estamos (en mayor o menor nivel), sufriendo bajo la enfermedad del pecado. ¡Qué consuelo saber que tenemos un gran Médico que es capaz y está dispuesto a sanarnos! Pensemos en Él un rato este día. 


Su forma de actuar es impecable. Sus curas son radicales: Ataca la raíz de la enfermedad, y por lo tanto, sus curas son seguras y ciertas. Nunca falla, y la enfermedad nunca vuelve. No hay recaída donde Cristo ha sanado. No teme que sus pacientes sean meramente remendados por un tiempo, Él hace nuevos hombres de ellos: también les da un corazón nuevo, y pone un espíritu justo en ellos. Él es bien experto en todas las enfermedades. Los médicos suelen tener alguna especialidad. Aunque conozcan un poco acerca de casi todos nuestros dolores y enfermedades, usualmente hay una enfermedad que han estudiado por encima de todos los demás. Pero Jesucristo conoce completamente la naturaleza humana. Está relacionado directamente con cualquier persona, y nunca se encontró con un caso extravagante que le era difícil. 

Cualquiera que sea nuestra enfermedad espiritual, debemos dirigirnos inmediatamente a este Divino Médico. No hay quebrantamiento de corazón que Jesús no pueda resistir. "Su sangre limpia de todo pecado." Sólo tenemos que pensar en las personas que han sido liberadas de toda clase de enfermedades por el poder y la virtud de su toque, y nos pondremos alegremente en sus manos. 

Nosotros confiamos en Él, y el pecado muere. Nosotros lo amamos, y la gracia vive. Lo esperamos y la gracia se fortalece. Lo vemos como es, y la gracia es perfecta para siempre. Bendito nuestro Sanador.

jueves, 8 de junio de 2017

AFLICCIÓN





2 Samuel 15:23
"Y todo el país lloró en alta voz; pasó luego toda la gente el torrente de Cedrón; asimismo pasó el rey, y todo el pueblo pasó al camino que va al desierto."


David pasó ese arroyo sombrío cuando estaba de duelo por darse cuenta que tenía un hijo traidor. El hombre según el corazón de Dios no estaba exento de problemas, y eso que su vida estaba llena de Él. Él era el ungido del Señor, y el afligido del Señor. ¿Por qué entonces debemos esperar escapar? A las puertas del dolor, los más nobles de nuestra raza han esperado con ceniza en sus cabezas; ¿Por qué nos quejamos como si algo extraño nos hubiera sucedido?

El rey David no fue favorecido con un camino más alegre o real. Pasó por encima de la inmunda zanja de Cedrón, por donde fluía la inmundicia de Jerusalén. Dios tuvo un Hijo sin pecado, pero ni un solo hijo sin la vara. Es una gran alegría creer que Jesús ha sido tentado en todos los puntos como nosotros. ¿Cuál es nuestro Cedrón este día? ¿Es un amigo infiel, un dolor triste, un reproche calumnioso, un oscuro presentimiento? El Rey ha pasado por encima de todo esto. ¿Es el dolor corporal, la pobreza, la persecución o el desprecio? Sobre cada uno de estos Cedrón, el Rey ha ido antes que nosotros. "En todas nuestras aflicciones estaba afligido." La idea de la extrañeza en nuestras pruebas debe ser desterrada de una vez y para siempre, porque el que es la Cabeza de todos los santos, conoce por experiencia la pena que consideramos tan peculiar. Todos los ciudadanos de Sión deben estar libres de la honorable compañía de los dolientes, de los cuales el príncipe Emmanuel es jefe y capitán.

A pesar de la humillación de David, volvió en triunfo a su ciudad, y el Señor de David se levantó victorioso de la tumba. Que tengamos buen ánimo, porque también nosotros ganaremos un día. Todavía con alegría extraeremos agua de los pozos de la salvación, aunque ahora por un tiempo debemos pasar por los nocivos arroyos del pecado y la tristeza.

Coraje, soldados de la Cruz, el Rey mismo triunfó después de pasar por Cedrón, ¡Y tú también!

miércoles, 7 de junio de 2017

¡LIBRE!





Romanos 6:6
"Sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado."



Cristiano, ¿qué tienes que ver con el pecado? ¿No te ha costado ya bastante? Un niño quemado no quiere volver a jugar con fuego Cuando ya estuviste entre las mandíbulas del león, ¿entrarás por segunda vez en su guarida? ¿No has tenido suficiente de la vieja serpiente? ¿Acaso no envenenó todas tus venas una vez?

¡Seamos sabios! Pensemos, sinceramente: ¿Alguna vez el pecado produjo un verdadero placer? ¿Encontraste satisfacción sólida en él? Si es así, vuelve a tu viejo trabajo pesado, y usa la cadena otra vez, si te deleita. Pero en la medida en que el pecado nunca te dio lo que prometió otorgar, sino que te engañó con mentiras, no seas una segunda vez atrapado por el viejo cazador. Sé libre, y que el recuerdo de tu antigua esclavitud te prohíba volver a entrar en la red.


Los cristianos nunca pueden pecar a bajo precio. Pagan un alto precio por la iniquidad. La transgresión destruye la paz de la mente, oscurece la comunión con Jesús, obstaculiza la oración, trae la oscuridad sobre el alma; Por tanto, no seamos siervos del pecado. Todavía hay un argumento más alto: cada vez que "sirves al pecado" has "crucificado de nuevo al Señor, y lo has puesto en una vergüenza abierta". ¿Podremos soportar ese pensamiento? 

Si has caído en algún pecado especial durante este día, puede ser que mi Maestro haya enviado esta advertencia justo hoy, para traerte de vuelta antes de que hayas retrocedido muy lejos. Vuélvete a Jesús de nuevo. Él no ha olvidado su amor por ti, Su gracia sigue siendo la misma. Con lloro y arrepentimiento, ven a Él, y serás una vez más recibido en Su corazón. Serás puesto sobre una roca otra vez, y tus salidas serán establecidas. ¡Vuelve a Dios!

martes, 6 de junio de 2017

PEQUEÑAS ZORRAS




Cantares 2:15
"Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñas;
Porque nuestras viñas están en cierne."


Un poco de espina puede causar mucho sufrimiento. Una pequeña nube puede ocultar el sol. Los pequeños zorros estropean las vides... Y pequeños pecados hacen daño al corazón tierno. Estos pequeños pecados se hunden en el alma, y ​​lo hacen tan lleno de lo que es odioso a Cristo, que nuestra relación con Él se ve gravemente afectada.


Un gran pecado no puede destruir a un cristiano, pero un pequeño pecado puede hacerlo miserable, porque el creyente lo puede llegar a trivializar. Jesús no andará con su pueblo a menos que expulsen todo pecado conocido. Él dice: "Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor, como yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor". Algunos cristianos muy raramente disfrutan de la presencia de su Salvador. ¿Cómo puede ser esto? Seguramente debe ser una aflicción para un niño tierno el ser separado de su padre. Pero muchas veces nosotros nos hallamos en la vida sin ningún tipo de relación con Dios ¡Qué! ¡Tú el cónyuge de Cristo, y sin embargo contento sin su compañía! 

Ciertamente, es éste un estado triste. Preguntémonos entonces: ¿Qué ha alejado a Cristo de ti? Si te sientes lejos de su rostro, como detrás del muro de pecados, es momento de actuar. Esa pared puede ser construida de pequeños guijarros, tan fácilmente como de grandes piedras. El mar está hecho de gotas. Las rocas están hechas de granos... y el mar que te separa de Cristo, se llenará de las gotas de tus pequeños pecados.Y la roca que casi ha destrozado tu barca, puede haber sido hecha por el trabajo diario de los insectos de coral de tus pequeños pecados. 

Si quieres vivir con Cristo, y caminar con Cristo, y ver a Cristo, y tener comunión con Cristo, ten cuidado de "las pequeñas zorras que arruinan las viñas, porque nuestras vides tienen uvas tiernas". Jesús te invita a ir con él y destruir cualquier cosa que se oponga entre tú y Él. ¿Estás dispuesto a aceptar la invitación?

lunes, 5 de junio de 2017

MUROS DERRIBADOS




Josué 6:26
"En aquel tiempo hizo Josué un juramento, diciendo: Maldito delante de Jehová el hombre que se levantare y reedificare esta ciudad de Jericó. Sobre su primogénito eche los cimientos de ella, y sobre su hijo menor asiente sus puertas."

El Señor lo ha demostrado a lo largo de la historia: Se complace en frustrar los esfuerzos injustos, y derribar todas las piedras que construyen. Lo vimos en Babel, con los muros de Jericó, etc. Por lo mismo, debemos asegurarnos que los esfuerzos que hacemos día a día estén enfocados en la construcción del reino de la luz, no de las tinieblas. 


¿Estamos haciendo todo lo que podemos por Jesús y el evangelio? Si no, nuestra negligencia puede jugar en nuestra contra. Debemos construir con nuestro testimonio, con lo que decimos, con lo que dejamos de hacer también. En estos tiempos donde la inmoralidad reina en cada país, es necesario que nos mantengamos firmes. Que seamos embajadores de Cristo en cualquier lugar donde estemos. Que nos reconozcan por nuestros frutos, en donde sea.

El día de hoy hagamos el firme propósito de construir con nuestra vida estructuras firmes para la patria celestial. No nos esforcemos en reconstruir murallas de nuestra vida que Dios ya derribó. Así sea en el nombre de Jesús.

domingo, 4 de junio de 2017

ABORRECER LA MALDAD





Salmos 45:7
"Has amado la justicia y aborrecido la maldad;
Por tanto, te ungió Dios, el Dios tuyo,
Con óleo de alegría más que a tus compañeros."


"Enójense, pero no pequen, dice la Escritura" No puede haber bondad en un hombre si no está 'enojado' con el pecado. El que ama la verdad debe evitar y aborrecer todo camino falso. Así lo hizo Jesús en su tiempo en la tierra. Tres veces lo asaltó en diferentes formas, pero siempre lo encontró con: "Aléjate de mí, Satanás". 


Mostró su enojo en contra de los religiosos de su época: "¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas!, porque habéis devorado las casas de las viudas, y por pretexto hacéis larga oración". Odiaba la maldad, tanto que sangró para herirla al corazón. Murió para matarla. Fue sepultado para sepultar a la maldad en su tumba. Y se levantó para que la pudiera tener siempre bajo sus pies. Cristo es el Evangelio, y ese Evangelio se opone a la maldad en todas sus formas. 

La maldad se arregla en vestidos justos e imita el lenguaje de la santidad. Pero los preceptos de Jesús, como su famoso azote de pequeñas cuerdas, lo persiguen fuera del templo, y no lo tolerarán en la Iglesia. Así también, en el corazón donde Jesús reina, ¡qué guerra hay entre Cristo y Belial! Y cuando nuestro Redentor venga a ser nuestro Juez, esas palabras trémulas, "Apartaos, malditos" que son, en verdad, una prolongación de su vida-enseñanza acerca del pecado, manifestarán su aborrecimiento de la iniquidad. Tan ardiente como es su amor a los pecadores, tan ardiente es su odio al pecado.

Tan perfecto como es su justicia, tan completa será la destrucción de toda forma de maldad. ¡Oh, glorioso salvador de los arrepentidos, y destructor de los malos! Ayúdame a aborrecer la maldad como tú lo haces. En el nombre de Jesús, amén.

sábado, 3 de junio de 2017

ESPERARÉ




Lamentaciones 3:21
"Esto recapacitaré en mi corazón, por lo tanto esperaré."


La memoria es frecuentemente esclava del desaliento. Las mentes desalentadas llaman al recuerdo cada presentimiento oscuro en el pasado, y se dilatan en cada aspecto sombrío en el presente. Así la memoria, vestida de cilicio, presenta a la mente una copa de hiel mezclada con ajenjo. No hay, sin embargo, ninguna necesidad para esto. La sabiduría puede fácilmente transformar la memoria en un ángel de consuelo. 


Ese mismo recuerdo que en tu mano izquierda trae tantos presagios sombríos, puede ser entrenado para llevar en la derecha una riqueza de signos esperanzadores. Así fue en la experiencia de Jeremías: en el versículo que da inicio al capítulo 3 de Lamentaciones, la memoria lo había llevado a la profunda humillación del alma: "Mi alma aún las recuerda, y se humilla en mí". Y ahora este mismo recuerdo le devolvió vida y consuelo. "Esto lo recuerdo a mi mente, por lo tanto espero." Como una espada de dos filos, su memoria primero mató su orgullo con un borde, y luego mató su desesperación con el otro. Como principio general, si pudiéramos ejercitar nuestros recuerdos con más sabiduría, podríamos, en nuestra más oscura angustia, golpear un fósforo que encendería instantáneamente la lámpara de la comodidad. 

No hay necesidad de que Dios cree una cosa nueva sobre la tierra para restaurar a los creyentes a la alegría. Sea nuestro día a día el recordar la misericordia del Señor, y recordar sus obras de gracia. Abramos el volumen del recuerdo, que está tan lleno de monumentos de misericordia, y pronto seremos felices. Que nada nos detenga de confiar y esperar en Dios. Así sea.

viernes, 2 de junio de 2017

A LOS QUE LLAMÓ





Romanos 8:30
"Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó."


Aquí hay una verdad preciosa para ti, creyente. Tú puedes ser pobre, o estar en sufrimiento, o sentirte excluido, pero eso no importa en la eternidad, porque Dios te ha escogido. Tan cierto como que tú eres hijo de Dios si has puesto tu fe en Jesucristo, es que todas tus pruebas pronto llegarán a su fin, y serás rico con toda clase de bienaventuranzas. 


Espera un poco, y esa cabeza cansada llevará la corona de gloria, y esa mano de trabajo agarrará la rama de la palma de la victoria. No llores tus angustias, sino más bien regocíjate de que pronto estarás donde "no habrá dolor, ni llanto, ni más dolor". Los carros de fuego están a tu puerta, y un momento será suficiente para llevarte a la gloria del Padre. La canción eterna está casi en tus labios. Los portales del cielo están abiertos para ti. No pienses que puedes dejar de entrar en el descanso. Si te ha llamado, nada te puede separar de su amor. 

La angustia no puede cortar el enlace con tu Padre celestial. El fuego de la persecución no puede quemar el eslabón que tienes con Dios. El martillo del infierno no puede romper la cadena. Tú estás seguro. Esa voz que te llamó al principio, te llamará de nuevo de la tierra al cielo, de la oscuridad oscura de la muerte a los inmortales esplendores no imputados. El corazón de aquel que te ha justificado, te gana el amor infinito. Pronto estarás con el glorificado, donde está tu porción. 

Ya llega el momento donde estarás "Lejos de un mundo de dolor y pecado, con Dios eternamente acompañándote". Descansarás en Él por los siglos de los siglos.