Éxodo 15:26
"Les dijo: «Yo soy el Señor su Dios. Si escuchan mi voz y hacen lo que yo considero justo, y si cumplen mis leyes y mandamientos, no traeré sobre ustedes ninguna de las enfermedades que traje sobre los egipcios. Yo soy el Señor, que les devuelve la salud»."
Desde el capítulo 15 en adelante, podemos ver las muchas formas en que Dios provee para su pueblo en el desierto. Y a pesar de que el pueblo podía experimentar la providencia de Dios, vemos a muchos seguir quejándose y murmurando contra Él y contra su siervo Moisés.
¿Cómo te provee Dios continuamente? ¿De qué nos ha librado gracias a Su Amor y Su Gracia inmerecida hacia nosotros? No sé tú, pero en mi caso me ha librado de la muerte, de vivir amargado por un hogar desintegrado, aún así me ha permitido pasar tiempo con mis hijos y tener la oportunidad de no repetir lo que mi padre hizo conmigo. Hay tantas cosas que ha hecho que no las puedo ni siquiera recordar.
Pasemos tiempo en oración agradeciéndole por su fidelidad. En lugar de enfocarnos en lo que no tenemos, en el tiempo que le dedicamos a Él... pasemos recordando lo bien que nos ha hecho estar cerca de Él... No seamos malagradecidos como el pueblo israelita.
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