Eclesiastés 8:15
"Por tanto, celebro la alegría, pues no hay para el hombre nada mejor en esta vida que comer, beber y divertirse, pues sólo eso le queda de tanto afanarse en esta vida que Dios le ha dado."
Salomón recuerda el remedio para las preguntas sin respuesta de la vida. Recomienda alegría y contentamiento como estímulo para nosotros a lo largo de la peregrinación de la vida.
Debemos aceptar cada día con su medida diaria de trabajo, comida, y de placer.
Aprendamos a disfrutar de lo que Dios nos ha dado para refrescar y fortalecernos mientras continuamos con el trabajo que Él nos ha encomendado. Es la mejor forma de aprovechar al máximo y disfrutar de la vida.
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