Proverbios 18:8
"Los chismes son deliciosos manjares;
penetran hasta lo más íntimo del ser."
Es tan difícil de rechazar a alguien que cuenta chismes, ya que es como rechazar un delicioso postre. Es tentador escuchar rumores y detalles sobre la vida de las demás personas, pero son dañinos para nuestra alma y corazón.
La Biblia compara los chismes con deliciosos manjares. Y en la vida cotidiana podemos comprobar esto. Tomar un sólo bocado de cualquiera de los dos (chismes o manjares) crea un gusto aumentado. Ahora bien, se pueden resistir los rumores y chismes de la misma manera que una persona a dieta resiste un caramelo: Ni siquiera abrir la caja. Si no caemos en la tentación de probar el primer bocado de chismes, no caeremos en el segundo, ni en el tercero, etc...
Tengamos el firme propósito de no participar de chismes, rumores o calumnias. Dios estará contento con nosotros. ¡Vale la pena!
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