Pues por medio de Él la ley del Espíritu de vida me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte. Ro 8:2
sábado, 23 de marzo de 2019
LLAMADO DE DIOS
Jeremías 1:7-8
"Pero el Señor me dijo:
«No digas: “Soy muy joven”, porque vas a ir adondequiera que yo te envíe, y vas a decir todo lo que yo te ordene.
No le temas a nadie, que yo estoy contigo para librarte». Lo afirma el Señor."
El llamado de Dios nos llena de propósito, dirección y fe. Cuando el ministerio se convierte en un trabajo y o bien olvidamos nuestro llamado de Dios, o dudamos de ese llamado, nos asustamos y perdemos nuestro camino. Dios promete guiar y dar poder a los que Él llama.
La unción divina de Dios le da a nuestras palabras un impacto transformador que ninguna otra forma de hablar conlleva. Cuando Dios está por nosotros, ¿quién puede estar contra nosotros? La voz del Señor y su consejo son un punto de referencia esencial para todo siervo de Dios.
Señor Jesús, tú eres mi pastor. Mis oídos están abiertos a tu consejo y dirección, para tu gloria.
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