Juan 7:37-39
"En el último día, el más solemne de la fiesta, Jesús se puso de pie y exclamó:
—¡Si alguno tiene sed, que venga a mí y beba! De aquel que cree en mí, como dice la Escritura, brotarán ríos de agua viva.
Con esto se refería al Espíritu que habrían de recibir más tarde los que creyeran en él. Hasta ese momento el Espíritu no había sido dado, porque Jesús no había sido glorificado todavía."
Los creyentes que beben del pozo de Jesús tendrán el Espíritu de Dios fluyendo de ellos. El griego es algo ambiguo en cuanto a si Jesús es la fuente de esta agua o si el creyente es la fuente (habiendo bebido del pozo).
En estos tiempos tan complicados, donde incluso vemos escasez en varios países del vital líquido, podemos ilustrarnos de mejor forma lo que significa tener y beber ríos de agua viva. Jesús nos está ofreciendo agua de vida, completamente gratis, sin necesidad de largas filas... ¿Estaremos dispuestos a ir y tomar de esa agua que da vida?
¿Quién en tu vida ha sido una fuente de sabiduría? ¿Es Jesús nuestro modelo de vida? ¿Estamos firmemente arraigados en Él, o aún hay temores en nuestra vida?
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