"El que a mí viene nunca tendrá hambre, y el que en mí cree no tendrá sed jamás."
Juan 6.35
Hay ocasiones en que lo que deseas es lo que nunca obtienes…
Oras y esperas:
No hay respuesta.
Oras y esperas.
¿Puedo hacerte una pregunta muy importante? ¿Qué si Dios dice no?
¿Qué si la petición se demora o te la niega? Cuando Dios te dice que no, ¿cómo respondes?
Si Dios dice: «Bástate mi gracia», ¿te quedarías tranquilo?
Si Dios dice: «Bástate mi gracia», ¿te quedarías tranquilo?
Tranquilo. Esa es la palabra. Una condición del corazón en la que uno está en paz aún cuando Dios no le dé más de lo que ya le ha dado.
¿Alguna vez hemos visto a un niño pedir sólo pasteles y pasteles en lugar de la comida normal? Es necesario llegar a un punto de decirle: "No". Él no lo entenderá, le podemos explicar sobre la nutrición, las cantidades de vitaminas que necesita su cuerpo, etc. Pero no lo entenderá. Él quiere sólo pasteles para comer. ¿Qué pasaría si le dijéramos que sí a todo?
Cuando Dios dice "No", está viendo más allá de lo que nosotros podemos ver. ¡Ah! y es lo mejor para nosotros.
Oración: Señor, ayúdame a entender tus decisiones y tu voluntad sobre mi vida. No quiero ser un mal agradecido, sino quedarme tranquilo y en paz aún cuando no me des más de lo que pienso que necesito y que eso me impida ver todo lo que ya me has dado. Te amo mi Dios, recibe mi vida hoy y siempre, en el nombre de Jesús, amén.
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