Mateo 22:42
"diciendo: ¿Qué pensáis del Cristo? ¿De quién es hijo? Le dijeron: De David".
La gran prueba de la salud de tu alma es: ¿qué piensas de Cristo? ¿Es para ti "más justo que los hijos de los hombres" - "el jefe entre diez mil" - el "del todo encantador"? Dondequiera que Cristo es así estimado, todas las facultades del hombre espiritual se ejercitan con energía. Puedes medir tu piedad con este barómetro: ¿Cristo es de alta o poca estima en tu vida? Si has pensado poco acerca de Cristo, si te has contentado con vivir sin su presencia, si te has preocupado poco por su honor, si has sido negligente con sus leyes, entonces tienes que saber que tu alma está enferma.
Pero si el primer pensamiento de tu día es: ¿Cómo puedo honrar a Jesús? Si el deseo diario de tu alma ha sido, "¡Oh, que yo supiera donde podría encontrarlo!" Te digo que puedes tener mil enfermedades, y hasta apenas saber si eres un hijo de Dios en absoluto, y sin embargo, estoy seguro, sin lugar a dudas, que estás a salvo, ya que Jesús es grande en tu estima. No me importan tus harapos, no me importan tus heridas, aunque sangren a borbotones, ¿qué piensas de Sus heridas? ¿Son como rubíes brillantes en tu estima?
¿Tiene Él un glorioso trono en tu corazón? ¿Lo pondrías más alto si pudieras? ¿Estarías dispuesto a morir si pudieras añadir otra trompeta a la canción que proclama su alabanza? ¡Ah! entonces está bien contigo. Lo que sea que pienses de ti mismo, si Cristo es grande para ti, estarás con Él dentro de poco.
"Aunque todo el mundo de mi elección se burle, sin embargo, Jesús será mi parte, porque no me agrada ninguno, el más hermoso del mundo es Él"
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