1 Samuel 28:1-2
"Por aquel tiempo, los filisteos reunieron sus tropas para ir a la guerra contra Israel. Por lo tanto, Aquis le dijo a David:
—Quiero que sepas que tú y tus hombres saldrán conmigo a la guerra.
—Está bien —respondió David—. Ya verá Su Majestad de lo que es capaz este siervo suyo.
—Si es así —añadió Aquis—, de ahora en adelante te nombro mi guardaespaldas."
¿Por qué estaba David preparado para luchar contra sus hermanos israelitas del lado de los filisteos?
La invitación a pelear con los filisteos vino de Aquis, no de David. Esto era parte de su engaño actual ahora que David estaba en territorio filisteo. Sin embargo, el engaño ahora se estaba volviendo difícil de ocultar y la presión bajo la que estaba David seguía aumentando. La transformación de Dios y el proceso de forja del carácter en David hicieron que David clamara a Dios por su perspectiva, fortaleza y liberación. Era una escuela de fe de la cual David estaba decidido a graduarse. En lo profundo del territorio enemigo y huyendo de su suegro, David confió en que el plan de Dios para su vida prevalecería.
¿Tendremos fe en los propósitos, la provisión y el plan de Dios, sin importar dónde estemos en la vida?
Señor Jesús, tú eres mi libertador y mi fe está en ti este día. Ayúdame a no dudar nunca, en tu nombre, amén.
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