Eclesiastés 12:13-14
"El fin de este asunto es que ya se ha escuchado todo. Teme, pues, a Dios y cumple sus mandamientos, porque esto es todo para el hombre.
Pues Dios juzgará toda obra, buena o mala, aun la realizada en secreto."
A lo largo del libro de Eclesiastés, Salomón señala la inutilidad de la vida. Anda por varios caminos mientras busca sentido en la vida: placer, riqueza, sabiduría, trabajo. No muchos de nosotros poseeremos el tiempo o los recursos para hacer el tipo de búsqueda que hizo Salomón, por lo que este libro nos brinda el beneficio de su experiencia y nos permite echar un vistazo al final de la historia. ¿Su conclusión? No importa cuánto intentemos fabricar un significado en la vida, el tiempo pasa y todos morimos.
¡Pero no te desesperes! Salomón nos dirige a la fuente fundamental para encontrar significado en la vida: conocer y vivir con Dios.
Piensa en las preguntas sin respuesta como puertas que se cierran en nuestras caras. Con una precisión desgarradora, Salomón nos obliga a mirar nuestras vidas y reconocer que existen estos obstáculos. Pero en lugar de tratar de proporcionarnos llaves para abrir esas puertas por nosotros mismos, Salomón nos señala a Dios, el cerrajero que promete ayudarnos a encontrar un camino.
En última instancia, el verdadero significado en la vida solo se puede encontrar en una relación con Dios, una relación que es el "deber de toda la humanidad" (versículo 13).
No hay comentarios:
Publicar un comentario