Isaías 55:1
"»¡Vengan a las aguas
todos los que tengan sed!
¡Vengan a comprar y a comer
los que no tengan dinero!
Vengan, compren vino y leche
sin pago alguno."
Millones de estadounidenses con dinero en el banco se mueren de hambre. Si bien los estadounidenses gastan más de 110 mil millones de dólares al año en alimentos, gran parte de ellos son simplemente "calorías vacías". El Dr. Jean Mayer observa: "Su cuerpo necesita una cierta cantidad de vitaminas A, C, D y hierro por libra de peso corporal, independientemente de la cantidad de alimentos que ingiera". La mayoría de los alimentos que se anuncian son "alimentos exóticos" con poco valor nutricional.
Lo que es cierto en lo físico también lo es en lo espiritual. Isaías preguntó hace mucho tiempo: ¿Por qué gastan dinero en lo que no es pan, y su salario en lo que no satisface? Escúchame atentamente y come lo bueno, y deleita tu alma en abundancia (Isaías 55: 2).
En nuestra era moderna, alimentamos nuestro espíritu y nuestra mente con mucha "comida", pero muy poca es espiritualmente nutritiva. La televisión, Internet, la radio, los periódicos y los libros nos ofrecen todo tipo de alimento mental, pero la mayor parte son "calorías vacías" y nos matarán de hambre. Amós predijo: "He aquí, vienen días", dice el Señor DIOS, "en que enviaré hambre a la tierra, no hambre de pan, ni sed de agua, sino de oír las palabras de Jehová" ( 8:11). Hemos vivido para ver esa hambruna espiritual.
Que los creyentes de todo el mundo prometan alimentarse de aquello que es edificante espiritual y moralmente.
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