Pues por medio de Él la ley del Espíritu de vida me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte. Ro 8:2
viernes, 27 de septiembre de 2019
LA FUENTE DEL AMOR
1 Juan 4:7-8
"Queridos hermanos, amémonos los unos a los otros, porque el amor viene de Dios, y todo el que ama ha nacido de él y lo conoce.
El que no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor."
* ¿Crees que alguna vez eres difícil de amar?
* Piensa en alguien que es difícil de amar. ¿Qué se necesitaría para poder demostrarle amor a esa persona?
¿Qué pasa si alguien te dice que te ama, pero luego difunde un terrible rumor sobre ti a tus espaldas? ¿Le creerías a esa persona? Tal vez si sucediera una vez, podrías perdonar y seguir adelante. Pero si sucediera una y otra vez, tendrías una buena razón para dudar del amor de esa persona.
Como creyentes, se supone que debemos amar a los demás como nos amamos a nosotros mismos. Sin embargo, a menudo somos culpables de tratar a las personas de maneras poco amorosas. Todos lo hacemos, y eso es una pena, porque no tiene por qué ser así. De hecho, no hay razón para que sea así.
Podemos usar la excusa de que solo somos humanos, pero no confiamos en el amor humano. Según 1 Juan 4:8, el Dios al que servimos es amor. Todo lo que es amor o muestra amor proviene de Él. Él es la fuente de todo amor.
Como sus hijos, tenemos acceso constante a su amor. Cuando tenemos dificultades para sentir amor por otras personas, solo necesitamos pedirle a Dios su amor. Eso es lo que quiere que hagamos. Si no mostramos el amor de Dios a los demás, le damos a las personas una razón para dudar si el amor de Dios está realmente en nosotros o si el amor de Dios es incluso real. Y una vez que la duda se arrastra, la confianza es difícil de recuperar.
Oración: Querido Dios, gracias por amarnos. Gracias por hacer que tu amor esté disponible para nosotros. Danos tu amor por los demás cuando no podamos hacerlo nosotros mismos. Amén.
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