Salmos 119:50
"Este es mi consuelo en medio del dolor:
que tu promesa me da vida."
Recuerdo que cuando era joven miraba a mi tía hacer conservas caseras. Lo que eso significaba para mí era que iba a ver jaleas y mermeladas fabulosas en la mesa para la cena.
Dios a veces mueve ingredientes en tu vida como sufrimiento, lucha y dolor para recordarte que dependas de Él. Aunque no lo parezca en ese momento, lo que Dios ha preparado para ti te dará una persona mucho más dulce y deseable si puedes soportar la prueba y el dolor.
Dios promete que estará contigo en esto y que preservará tu vida. El proceso no siempre es agradable en ningún ámbito de pensamiento, pero la crianza de los hijos nos permite comprender esto de una mejor forma.
Gracias a Dios por sus promesas ya que hacen las mejores conservas.
Para Reflexionar:
* ¿Qué te ha traído Dios últimamente?
* ¿Cómo has aprendido de esa experiencia?
* ¿Cuáles han sido algunas experiencias que puedes compartir con tus hijos para que puedan aprender en esta área?
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