Pues por medio de Él la ley del Espíritu de vida me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte. Ro 8:2
miércoles, 27 de abril de 2016
CEGUERA
Marcos 10:47
"Y cuando oyó que era Jesús el Nazareno, comenzó a gritar y a decir: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!"
Creo que preguntarle a un ciego qué quisiera en la vida sobraría. Marcos, en este pasaje quiere que vayamos más allá de los hechos de la historia y vemos algunas implicaciones espirituales de la sanación del ciego.
Lo que vemos en Bartimeo es una aspiración sugerente. Bartimeo era ciego, y él tenía un deseo de ver. Hay una aplicación simbólica aquí. Bartimeo era ciego y lo sabía. Jesús le hace la misma pregunta que hizo a sus discípulos: "¿Qué quieres que haga por ti (v 36)?" La respuesta de Bartimeo era muy diferente de la de los discípulos. El dijo: "Maestro, que recobre la vista." Los discípulos estaban "a ciegas", pero no lo sabían. Ellos pensaron que podían ver, pero no pudieron. Bartimeo sabía que no podía ver.
Creo que lo que Marcos está comunicando es que tenemos que pedirle a Dios que abra nuestros ojos, para que veamos las implicaciones de nuestros deseos. Tenemos que abrir los ojos, para que podamos ver lo que es importante, muy importante para Dios. Porque lo que es importante para Dios debe ser importante para nosotros. la ceguera de los discípulos es un símbolo de la ceguera de los hijos de Dios. Con nuestros ojos sobre nosotros mismos, no podemos ver. Nuestra oración debería ser: "Señor, que recobre la vista. Quiero ver a través de tus ojos. Quiero entender lo que es realmente importante para ti. Señor, ayúdame a ver ".
La ceguera espiritual sólo puede ser sanada con medicamentos espirituales. Oremos a Dios para que no estemos espiritualmente ciegos y seamos capaces de ver nuestra condición como alguien que necesita la ayuda de Dios.
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