ROBOAM

 

1 Reyes 12:6-8

"El rey Roboam consultó con los ancianos que en vida de su padre Salomón habían estado a su servicio.

—¿Qué me aconsejan ustedes que le responda a este pueblo? —preguntó.

—Si Su Majestad se pone hoy al servicio de este pueblo —respondieron ellos—, y condesciende con ellos y les responde con amabilidad, ellos le servirán para siempre.

Pero Roboam rechazó el consejo que le dieron los ancianos, y consultó más bien con los jóvenes que se habían criado con él y que estaban a su servicio..."

Salomón muere y su hijo Roboam lo sucede como rey. ¿Qué le pide la gente? Que alivie un poco el pago de tributo ¿Cuál es su actitud y su respuesta? 

Inicia bien, le pide consejo a los ancianos, y le dan un consejo sabio. Le pide consejo a los jóvenes que se habían criado con él y le dicen lo que quiere escuchar. Lo que sucede es que pone en práctica el consejo que él quería escuchar. Esa respuesta de Roboam lleva a dividir el Reino y a partir de allí el Reino del Norte sólo va en decadencia. Él empieza construyendo dos becerros de oro y de allí en adelante ese reino ya no vería la luz hasta que serían desterrados a Babilonia.

Es increíble el valor de los consejos de las personas que han adquirido sabiduría y experiencia a lo largo de los años. ¡No los menospreciemos! Es cierto que edad no es sinónimo de sabiduría, pero sí es cierto que las personas que ya han pasado por la escuela de la vida nos pueden dar un mejor panorama de alguien que, como nosotros, aún no ha vivido lo suficiente. Recordemos: Aprender de los errores propios es una forma de inteligencia. Aprender de los errores de los demás es sabiduría.

Oración: Señor, ayúdame a escuchar consejos. A actuar con sabiduría y no únicamente querer escuchar los consejos que quiero oír. Quiero ser sabio y agradarte, ayúdame. En el nombre de Jesús, amén.