1 Corintios 2.16 (La Biblia Al Día)
"El pensamiento de los cristianos es el mismo de Cristo."
La distancia entre nuestros corazones y el corazón de Jesús parece inmensa. ¿Cómo podríamos esperar alguna vez tener el corazón de Jesús?
¿Estás listo para una sorpresa?
Ya lo tienes… Si estás en Cristo, tienes ya el corazón de Cristo.
Una de las supremas promesas de Dios, aunque no realizada aún, es esta: si has entregado tu vida a Jesús, Jesús se ha dado a sí mismo a ti. Ha hecho de tu corazón su hogar. Sería difícil decirlo en forma más clara que como lo dice el apóstol Pablo: «Cristo vive en mí» (Gálatas 2.20).
Él se ha instalado en ti, ha desempaquetado sus maletas y está listo para transformarte «de gloria en gloria en su misma imagen» (2 Corintios 3.18).
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