Pues por medio de Él la ley del Espíritu de vida me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte. Ro 8:2
miércoles, 17 de febrero de 2016
¡RESCÁTANOS!
Salmos 44:26
"Levántate, ven a ayudarnos,
y por tu gran amor, ¡rescátanos!"
¿Por qué Dios no protege y ayuda esta vez? Perplejidad y preguntas se agolpan cuando vemos que Dios no repite Sus actos de liberación.
El salmo comienza con el recuerdo de las victorias que el pueblo de Dios había disfrutado como nación (vs 1-8). La diestra de Dios y su poderoso brazo habían actuado en su nombre. Sus enemigos habían sufrido una derrota decisiva...
Recuerdos alegres del pasado ahora dan paso a la dolorosa actualidad (vs 9-16). "Pero ahora" (v 9) se inicia la lista de presente la vergüenza y la derrota. Tenga en cuenta las palabras que explican el estado de la nación: "rechazado, humillado, retiro, saqueado, devorado, dispersos" (vs 6-11). ¡Los triunfos en Dios se veían tan lejos!
Hay razones por las que Dios permite ir a través de la derrota y sufrimiento? Hay tres palabras significativas: "por nuestro bien". El sufrimiento puede ser una cicatriz de batalla en lugar de un castigo; el precio de la lealtad en un mundo que está en guerra con Dios.
No vamos a dejar de hablar de los poderosos hechos de liberación que ha efectuado el Señor. Vamos a seguir escuchando con asombro y adoración y rendidos a sus pies, aún si las cosas no salen bien. A través de los tiempos buenos y malos, todavía encontraremos nuestra esperanza y Su misericordia, si confiamos en Él. ¡Puede rescatarnos!
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