Isaías 30:18
"Por tanto, Jehová esperará para tener piedad de vosotros, y por tanto, será exaltado teniendo de vosotros misericordia; porque Jehová es Dios justo; bienaventurados todos los que confían en Él."
Dios a menudo demora en responder a la oración. Tenemos varios ejemplos de esto en las Sagradas Escrituras. Jacob no obtuvo la bendición del ángel hasta cerca del amanecer - tuvo que luchar toda la noche por ello. A la pobre mujer Sirofenicia no se le respondió ni una palabra durante mucho tiempo. Pablo rogó al Señor tres veces que le quitara "el aguijón en la carne", y no recibió ninguna garantía de que se lo quitarían, sino que por el contrario se le prometió que la gracia de Dios sería suficiente para él. Si has estado llamando a la puerta de la misericordia y no has recibido respuesta, ¿Hay alguna razón por la que pienses que has sido olvidado?
Nuestro Padre tiene razones importantes por las que nos mantiene esperando. Algunas veces es para mostrar su poder y su soberanía, para que los hombres sepan que Jehová tiene el derecho de dar o retener. Con mayor frecuencia, la demora es para nuestro beneficio. Tú quizás estés esperando que tus deseos sean más fervientes sean cumplidos.. y rápido. Dios sabe que la demora acelerará y aumentará el deseo, y que si te hace esperar verás tu necesidad más claramente y buscarás más seriamente; y que apreciarás más la misericordia por su larga espera. También puede haber algo malo en ti que haya que eliminar...
Tal vez tus puntos de vista sobre el plan del Evangelio sean confusos, o puedes estar confiando un poco en ti mismo, en lugar de confiar simple y completamente en el Señor Jesús. No permitas que la desesperación te haga callar o dudar, sino que continúa instantáneamente en súplica sincera.
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