domingo, 26 de enero de 2014

BENDICIÓN PARA OTROS




Creo que una de las grandes oportunidades que tenemos como cristianos es hacer una profunda diferencia en las vidas de otros.  Hemos visto en numerosas circunstancias que Dios nos da la oportunidad de ayudar a muchas personas que necesitan orientación.

Pero yo no creo que esta sea una oportunidad especial que Dios hizo exclusivamente para ciertas personas de renombre. Todo el mundo, tú bien lo sabes, tiene la capacidad de influir en alguien. Cuando tú te tomas el tiempo para llegar a otros e invertir en la vida de alguien, tú realmente estás impactando el mundo ... el tuyo y el de ellos.

Gálatas 6:10 nos dice que "siempre que tengamos la oportunidad, hagamos bien a todos, y en especial a los de la familia de la fe."
Esto es, a todos los que Dios pone en nuestro camino. Estamos llamados a ser una bendición y edificar a otros en su fe, para que no tengan miedo de acercarse y hablar la verdad en amor.

Yo no creo que Dios quiera que seamos meros espectadores de la vida. Él quiere que seamos personas que realmente aman a los demás y nos preocupemos lo suficiente como para estar dispuestos a invertir (tiempo) en sus vidas. Tenemos que construir en otros en el nombre de Jesús para que puedan crecer y llegar a más gente.

Ya sea que lo sepas o no, alguien te está viendo. La gente está influenciada por la forma en que vive y necesita ver el amor de Dios en sus acciones cotidianas.

A veces vamos a cometer errores, y cuando lo hacemos, podemos dar gracias a Dios por su perdón, pero también tenemos que darnos cuenta de que muchas veces nosotros somos la única evidencia de que Dios es real para muchas personas. Así que en este hermoso día yo te animo a que utilices la influencia que tienes sobre otras personas. Quizás sean compañeros de trabajo, de estudio, etc. Pero seguramente tú tienes influencia sobre tu familia y amigos. ¡Que la luz de Dios y de Cristo se vean reflejados por medio de tu comportamiento!

Oración: Dios, todos los días hay una oportunidad que me has dado, para extender la mano, bendecir e influir en otra persona con tu amor. Quiero vivir una vida de bendición hacia los demás, mostrándoles lo que significa vivir una vida enfocada en Dios. En el nombre de Jesús te lo pido.

Así sea.

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