domingo, 26 de junio de 2016

FIDELIDAD Y LEALTAD


Génesis 24:7
"El Señor, Dios de los cielos, que me tomó de la casa de mi padre y de la tierra donde nací, y que me habló y me juró, diciendo: “A tu descendencia daré esta tierra”, El mandará su ángel delante de ti, y tomarás de allí mujer para mi hijo."

Génesis 24 es el capítulo más largo en el Génesis, y, curiosamente, se dedica a la búsqueda de una esposa para Isaac. Fue iniciada por Abraham, que se determinó que su hijo de la promesa debe permanecer en la tierra prometida y que sus descendientes deben permanecer israelitas puros. El pasaje de hoy forma la primera parte de esta hermosa novela.

Uno puede preguntarse por qué tanto la narrativa, aunque su característica es romántica, pero se le dio a un único evento de naturaleza aparentemente no teológica. Los no judíos pueden perderse el especial significado de este relato encantador.

Observamos que Ismael se había casado con una esposa egipcia (21:21). Vemos más tarde (26:34) que Esaú se casaría con dos mujeres hititas. Isaac y Rebeca iban a ser los padres de toda una nación de Israel. Abraham era insistente que no debe haber pérdida de pureza en la población israelita. Por otra parte, sabía que la salida de la tierra prometida no era el plan de Dios para Isaac. La existencia eterna de la guía divina también se destaca en la historia. Además, un modelo para la vida de un servidor de confianza es retratado para nuestro beneficio.

Observemos que el servidor fiel, aunque sin nombre, era un vehículo fundamental para la entrega de las bendiciones de Dios en los asuntos diarios de esta familia. Llevó a cabo su misión mediante la oración, la adoración y la narración de la bondad de Dios a su amo (vs 26-27), porque el Señor lo había bendecido en todos los sentidos (v 1).

1 Corintios 4:2 dice: "
Ahora bien, a los que reciben un encargo se les exige que demuestren ser dignos de confianza".

¿Cómo estás comportándote en el trabajo con lo que se te ha encargado?

Oremos por la fidelidad en todas las cosas, ya sean grandes o pequeñas, visibles o invisibles.

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