Pues por medio de Él la ley del Espíritu de vida me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte. Ro 8:2
martes, 28 de junio de 2016
LA PRIMERA CARTA A LOS CORINTIOS
1 Corintios 1:1-3
"Pablo, llamado a ser apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios, y Sóstenes, nuestro hermano, a la iglesia de Dios que está en Corinto, a los que han sido santificados en Cristo Jesús, llamados a ser santos, con todos los que en cualquier parte invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro: Gracia a vosotros y paz de parte de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo."
El contexto sociológico e histórico que surge en el telón de fondo de 1 Corintios es uno de una comunidad predominantemente gentil. Como antiguos adoradores de ídolos y otros "dioses", estos creyentes trajeron una visión del mundo helenístico pegada a la fe cristiana. Aunque eran la iglesia cristiana de Corinto, aún estaban muy influenciados por la visión del mundo desde el punto de vista de Corinto. Su comportamiento requería una importante revisión y corrección. Esto es lo que Pablo intenta hacer en su carta a la iglesia.
Pablo escribió 1 Corintios como una respuesta a una carta que le aporta Estéfanas, Fortunato y Acaico. Los lectores tienen que darse cuenta de que 1 Corintios tiene más sentido cuando se lee y se entiende como una respuesta de Pablo a la iglesia que escribió su respuesta a una carta Paulina anterior (en otras palabras, esta es, al menos, la segunda carta de Pablo a la iglesia de Corinto). No se han encontrado los documentos que hacen referencia a esta carta previa.
Teniendo en cuenta el tono argumentativo de gran parte de su respuesta, parece muy probable que la carta de los Corintios haya estado en desacuerdo con Pablo en diversos asuntos. Una cuestión clave es la cuestión de la autoridad de Pablo como apóstol de Cristo y fundador de la iglesia. Una segunda área de preocupación es la modificación del Evangelio hacia una visión del mundo pagano y la filosofía. Para Pablo estas dos cuestiones se relacionan de manera crucial: no era tanto su persona en juego o la negación de su autoridad apostólica, sino el asunto principal era el Evangelio que les predicaba a ellos.
Se ha señalado que muy probablemente la cuestión clave entre Pablo y la iglesia de Corinto es un problema teológico básico de lo que significa ser "pneumatikos", es decir espirituales.
En los siguientes días estaremos estudiando esta carta. ¡Acompáñanos!
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