Pues por medio de Él la ley del Espíritu de vida me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte. Ro 8:2
miércoles, 28 de diciembre de 2016
NO TIENES QUE MORIR
2 Reyes 7:3
"Había a la entrada de la puerta cuatro hombres leprosos, los cuales dijeron el uno al otro: ¿Para qué nos estamos aquí hasta que muramos?"
Abre tu Biblia, y lee esta historia de los leprosos, y marca tu posición. Si estamos lejos de Dios y permanecemos allí, vamos a morir. Pero si vamos a Dios por medio de Jesús, viviremos.
"El que no arriesga, no gana" dice un conocido dicho. Jesús no echa a ninguno que venga a Él. No vas a ser rechazado ni vas a morir sin confías en Él. Por el contrario, encontrarás un tesoro mucho más rico que los pobres leprosos reunidos en el campamento desierto de Siria. Que el Espíritu Santo te anime a ir de una vez, y no vas a creer en vano. Deja que ese convencimiento de pecado te ayude a confesarlo y a dejarlo, a creer y confiar en Jesús y a entregar tu vida a Él. Ya fue suficiente de vivir lejos de la voluntad de Dios.
Y cuando te salves, publica las buenas nuevas a los demás. Anuncia y proclama lo que Dios ha hecho por tí, porque puede ser que alguien más se salve al ver la obra redentora de Cristo en tu vida. Así sea.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario