Pues por medio de Él la ley del Espíritu de vida me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte. Ro 8:2
jueves, 21 de diciembre de 2017
FE
Marcos 2:4
"Y como no podían acercarse a él a causa de la multitud, descubrieron el techo de donde estaba, y haciendo una abertura, bajaron el lecho en que yacía el paralítico."
La fe produce hasta inventos, creatividad. La casa estaba llena, una multitud bloqueaba la puerta, pero la fe encontró una manera de llegar al Señor y colocar al hombre paralítico delante de Él. Si no podemos conseguir llegar a donde está Jesús está por métodos ordinarios, debemos usar los extraordinarios. Según Lucas 5:19, parece que se tuvo que remover un mosaico, lo que generaría polvo y causaría una medida de peligro para los de abajo, pero cuando el caso es muy urgente no debemos evitar correr algunos riesgos y escandalizar a algunos... Jesús estaba allí para sanar, y por lo tanto la fe se aventuró todo para que el pobre paralítico pudiera recibir sanidad. ¡Oh, que tuviéramos una fe más atrevida entre nosotros!
¿No podemos, querido lector, buscar esta mañana alguna necesidad propia o ajena y volcarnos al señor en oración?
El mundo está constantemente inventando; el genio sirve a todos los propósitos del deseo humano: ¿no puede la fe también inventar y alcanzar por algún medio nuevo a los marginados que parece que están pereciendo a nuestro alrededor? Fue la presencia de Jesús lo que motivó el valor victorioso en los cuatro portadores del hombre paralítico: ¿no está el Señor entre nosotros ahora? ¿Hemos visto su cara esta mañana? ¿Hemos sentido su poder sanador en nuestras propias almas? Si es así, entonces, a través de la puerta, a través de la ventana o a través del techo, rompiendo todos los impedimentos esforcémonos por llevar las almas a Jesús.
Todos los medios son buenos y decorosos cuando la fe y el amor se establecen verdaderamente en las almas ganadoras. Si el hambre por el pan puede romper las paredes de piedra, seguramente el hambre de almas no se verá obstaculizada en sus esfuerzos.
Oh Señor, haznos rápidos en sugerir métodos para llegar a los enfermos de pecado, y audaces para llevarlos a tí aún superando todos los riesgos. Así sea.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario