LOS HIJOS SIN DISCIPLINA...

1 Samuel 2:12
"Los hijos de Elí eran hombres indignos; no conocían al Señor..."
Por desgracia, algunos líderes de hoy en día, incluso los líderes en una congregación, son ejemplares en técnicas de gestión, pero en realidad carecen de los de la disciplina paternal en sus propios hogares. Como resultado, en las sociedades opulentas, como Singapur, nos encontramos con muchos padres indulgentes con niños pequeños egocéntricos en mal estado. Un pastor de Asia recientemente advirtió que si no disciplinamos a nuestros hijos cuando son jóvenes, van a 'perseguirnos' cuando se conviertan en adolescentes.

Eli, aunque un sacerdote muy respetado, era un padre con destrezas paternales muy pobres. Y debido a eso, Dios estaba totalmente decepcionado de él (v 29), a pesar de que era de trayectoria distinguida, siendo el hijo de Itamar, el hijo menor de Aarón, hermano de Moisés mismo, sus hijos autocomplacientes Ofni y Finees no lo respetaban ni a él ni a nadie. Es probable que ambos estuvieran casados, o al menos Finees (4:19), pero dormían con otras mujeres (v 22). Por encima de todo, en el cargo de sacerdotes con avidez arrebataban la mejor parte de los sacrificios del pueblo (v 15). A causa de sus pecados, los descendientes de Eli perdieron su sacerdocio.

A través de un profeta, Dios confrontó a Eli por ''honrar a sus hijos por encima de su Dios" (v 29). Dios le dio una severa advertencia de que "a los que me honran honraré y los que me desprecian los despreciaré". Los hijos de Elí pudieron ser despreciables, pero fue Eli, su padre a quien Dios culpó por no ser capaz de controlarlos (3:13). Tal vez la razón por la que muchos jóvenes se están portando hoy en día de una forma "salvaje" es que tienen padres que los educan sin disciplina y amonestación del Señor.

¿No son los hijos una bendición y un préstamo de Dios? ¿Cómo es que estos dones temporales son a menudo más "valiosos" que el Dador? Demasiado preciosos incluso para disciplinar... Que no pase esto en nuestros hogares. Honremos a Dios por sobretodo y eduquemos y disciplinemos a nuestros hijos.