Levítico 25:18
"“Cumpliréis, pues, mis estatutos y guardaréis mis leyes, para ejecutarlos, para que habitéis seguros en la tierra."
"En los municipios, señor, usted no encontrará iglesias. Usted ve, la religión es para los necesitados. Nosotros no la necesitamos", dijo un líder de la comuna al hermano Andrew (fundador de Puertas Abiertas Internacional) en uno de sus primeros viajes misioneros a China. Harto de las injusticias del capitalismo, el comunismo dio sus primeros pasos seguros hacia un mundo mejor - sin Dios-. El proyecto fracasó.
En este capítulo, Dios le dio a Israel indicaciones para una sociedad modelo. A la gente se le permitió realizar sus aspiraciones, amasar riqueza y la propiedad. Sin embargo, la igualdad fue restaurada periódicamente. Esta práctica dio dignidad a los seres humanos y reconoció que todos los recursos pertenecen en última instancia, a Dios.
A la Tierra y el trabajo se les dio una atención especial. Cada 7 y 50 años, no se permitía ninguna actividad agrícola organizada. Cada 50 años, la tierra se devolvía a los propietarios originales y los esclavos hebreos eran liberados. También se proporcionó la redención por la tierra y esclavos en otras ocasiones.
El sueño de Asia, según algunos, era dejar una gran fortuna a los hijos. Sin embargo, también se observa que las grandes fortunas rara vez duran más de tres o cuatro generaciones y causan muchos problemas y dolores de cabeza hasta que se agotan. Estas leyes podrían prevenir tales 'desgracias' y permitir a las personas en situaciones desesperadas poder empezar de nuevo. Reconocer a Dios y obedecer sus preceptos son las únicas maneras de una vida mejor para la sociedad y el individuo. El Jubileo también se refirió al 'resto' y 'liberación' durante la era mesiánica.
Pidamos hoy a Dios que nos ayude a utilizar los recursos que ha puesto en administración nuestra a que realmente los utilicemos como si no fueran nuestros, sino de Él. ¡Muchas cosas pueden cambiar!
No hay comentarios:
Publicar un comentario