Marcos 9:23
"Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible."
Muchos cristianos profesos siempre dudan y temen, y piensan desesperadamente que este es el estado necesario de los creyentes. Esto es un error, porque "todo es posible al que cree"; y es posible para nosotros montar en un estado en el cual la duda o el temor estén, pero debiera ser como un pájaro de paso que vuela a través del alma, y nunca un estado perpetuo o un estilo de vida.
Cuando tú te enteras de las altas y dulces comuniones de los santos favorecidos, puede que suspires y digasdentro de ti: "¡Ay!, ésto no es para mí". Oh creyente, si no tienes fe, todavía estarás atorado en las cosas básicas, porque la verdad es que "todas las cosas son posibles al que cree". Oyes de las hazañas que los santos han hecho por Jesús; lo que han disfrutado de Él; cuánto han sido como Él; cómo han sido capaces de soportar grandes persecuciones por su causa; y tú dices: "¡Ah!, yo soy como un gusano, jamás podré alcanzarlo". Pero no hay nada que haya sido un santo, que haya sido por sus propios medios, y el Espíritu de Dios está a tu alcance también. No hay elevación de gracia, ni logro de espiritualidad, ni claridad de seguridad, ni puesto de deber, que no esté abierto a nosotros si creemos genuinamente. Aparta tu cilicio y tus cenizas, y sube a la dignidad de tu verdadera posición; no conviene que te arrastres en el polvo, porque eres hijo de un Rey.
¡El trono de oro de la seguridad te está esperando! La corona de comunión con Jesús está lista para taparte la frente. Cúbrete en lino escarlata y fino, porque si crees, comerás banquetes, tu tierra fluirá con leche y miel, y tu alma se saciará diariamente. Reúne las gavillas de oro de la gracia, porque te esperan en los campos de la fe. "Todas las cosas son posibles para el que cree".
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